Irán ataca con misiles bases estadounidenses en Irak sin dejar víctimas
Dos bases militares en Irak, que albergan soldados estadounidenses e iraníes, fueron atacadas con más de 12 misiles balísticos lanzados desde Irán, como parte de represalias por el ataque estadounidense que mató al comandante iraní Qasem Soleimani.
El ataque contra las instalaciones militares en Irak, fue realizado por la Guardia Revolucionaria del país islámico, en venganza por el asesinato del general Soleimani por parte de Estados Unidos.
La muerte del general iraní la semana pasada en un ataque estadounidense con aviones no tripulados cerca de Bagdad provocó furiosas órdenes de Irán para vengar su muerte.
Según la prensa estatal iraní, los ataques mataron a al menos 80 soldados estadounidenses y también dañaron helicópteros, aviones no tripulados y otros equipos en la base aérea de Ain al-Asad.
Los ataques, que ocurrieron cuando Irán enterró a Soleimani, aumentaron los temores de que los dos enemigos de toda la vida estaban más cerca de la guerra. Pero hubo algunos indicios de que no habría más represalias en ninguno de los lados, al menos a corto plazo.
«¡Está bien!», Tuiteó el presidente Donald Trump poco después de los ataques con misiles iraníes, y más tarde, Trump confirmó que no hubo victimas de soldados estadounidenses.
«No se perdieron vidas estadounidenses o iraquíes”, dijo Trump en un mensaje a la nación desde la Casa Blanca flanqueado por altos funcionarios civiles y militares del gobierno, y agregó: “Estados Unidos está listo para abrazar la paz con todos los que la buscan”.
«Nuestras fuerzas aéreas y soldados están preparados para todo. Ningún estadounidense o iraquí falleció tras este ataque, porque tomamos medidas de precauciones, gracias al sistema antimisiles», recalcó el mandatario.
Trump, también anunció que impondrá nuevas «poderosas» sanciones contra Irán, pero no dijo nada si responderá a la agresión con una nueva acción militar.
Irán está actualmente clasificado por la Misión Open Doors como el noveno país que más persigue a cristianos en el mundo, convirtiéndose así en un gran violador de los derechos humanos fundamentales.
A pesar de la intensa persecución religiosa en el país, los cristianos en Irán sigue en constante crecimiento y los pastores locales están reportando cada vez más un avivamiento.