El Presidente De Paraguay Llora, Clama A Dios Y Ordena El Aislamiento Total De Su País Hasta El 12 De Abril
“Estamos atravesando una situación nunca antes vivida en el país y el mundo”, dijo el presidente de la República, Mario Abdo Benítez durante su discurso, al anunciar la prolongación de la cuarentena sanitaria a la que está sometida todo el país.
Con esta medida, el Gobierno busca aplacar el avance del coronavirus con la limitación de la circulación por las calles. Es así que decreta el paro total de actividades, aunque se garantizan los servicios básicos. También estableció que las dependencias del Estado trabaje con el mínimo de personal en algunos casos, y en otros se estableció el cierre total. “Jamás imaginamos que en una semana las cosas cambiarían tan rápido, en el mundo y en el Paraguay”, siguió diciendo.
El periodo de cuarentena se prolonga hasta el 12 de abril y el Ministerio del Interior velará por el cumplimiento de lo establecido. No obstante, aclaró que no se sabe cuál es el verdadero alcance de la pandemia, ni siquiera se conoce hasta cuándo podría seguir la situación generada por el contagio masivo del virus a nivel mundial.
“Las estadísticas nos muestras que las medidas de aislamiento son las correctas”, dijo al anunciar que hasta el 28 de marzo, el cese en las actividades será total, iniciando este paro a la medianoche de este viernes. “No podemos permitir que este virus se propague aún más en nuestro país”, sostuvo.
“Evitemos el pánico”, solicitó el Presidente mientras hablaba a los habitantes del Paraguay desde el Palacio de López, solicitando toda la responsabilidad del pueblo paraguayo, caracterizado por ser “guerrero”, para acatar las medidas sanitarias que se vienen aplicando.
“Si ahora no respetamos el aislamiento, corremos el riesgo que esto se propague en magnitudes incontrolables”, expresó el mandatario, al tiempo de admitir que ningún sistema de salud tiene capacidad de dar respuesta a una propagación masiva y acelerada del virus.
“Seamos conscientes. Por favor quédense en casa, juntos en familia y unidos en oración”, señaló.
Si bien se cierra la mayor parte de los negocios, quedarán abiertos solamente algunos comercios vinculados a la venta de alimentos, transporte público, insumos necesarios y para preservar la salud pública y familiar.
“Si queremos ganar la guerra contra este enemigo invisible, debemos unirnos, trabajar en equipo. Aquí no hay posición económica, ni partido político ni nada. Si algo nos enseñó esta situación es que todos somos iguales”, reflexionó.
Con esta medida, el Presidente exige que la clave para enfrentar al coronavirus es evitar la circulación masiva en los espacios públicos. “Debemos quedarnos en casa. La circulación se reduce a lo mínimo”, aseveró.
Se debe “Aplanar la curva”, dijo y que en términos simples significa evitar que el número de contagios y de víctimas escale como consecuencia del contacto directo entre los portadores y el resto de la ciudadanía. Llamó al coronavirus como el “enemigo invisible”.
En este sentido, el Presidente anunció este viernes una “cuarentena blindada” que se inicia desde la fecha en todo el país.